Preguntas frecuentes (FAQ)

Artritis significa inflamación articular, mientras que artrosis significa desgaste articular.
Existen muchos tipos de artritis, entre ellas la artrosis. La artrosis es una enfermedad degenerativa que afecta al cartílago, al hueso subcondral y a la membrana sinovial (sinovitis) que puede cursar con inflamación muchas veces y que puede aumentar con la edad.

Existe una predisposición genética a padecer artrosis en algunos casos, por ejemplo, en la artrosis que afecta a los dedos de las manos hay una anomalía genética específica que se da especialmente en las mujeres. Salvo en estos casos, la herencia genética es un factor que no hay que temer demasiado.

No, no existe una pauta común a todos los enfermos y aplicable a todo. Cada persona es diferente. En algunas personas la enfermedad se desarrolla más rápidamente o sus síntomas son más importantes que en otras.

No. Si bien es cierto que la degeneración del cartílago articular está relacionado con la edad, la artrosis también aparece en otros grupos de personas: mujeres mayores de 45 años, deportistas e incluso jóvenes.

Evita los factores de riesgo modificables de la enfermedad como: la obesidad, la vida excesivamente sedentaria y la sobrecarga de las articulaciones.

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) pone a disposición de los pacientes los recursos NotificaRAM, para notificar reacciones adversas y NotificaPS, para notificar incidentes con fármacos que puedan afectar a nuestra salud.

 

La AEMPS también pone a tu disposición CIMA para consultar prospectos, disponibilidad, suministros… de medicamentos autorizados.

 

Recuerda consultar siempre con tu médico cualquier aspecto relacionado con tu tratamiento.

Sí, dado que reducir la carga que soportan tus articulaciones ayudará a quitarles tensión y evitarás su desgaste prematuro.

No hay que sobrecargar la articulación, aunque tampoco es recomendable dejar de realizar la actividad física, puesto que ello puede empeorar la artrosis y afectar la movilidad y la autonomía de la persona. En caso de duda, es recomendable acudir a un profesional sanitario y pedirle asesoramiento sobre qué ejercicios son más adecuados.

Caminar, nadar, marcha nórdica, tai chi, aqua gym o ir en bicicleta. Debemos evitar los deportes de impacto como el baloncesto o el fútbol.

Envíanos tu consulta