2. Alimentación saludable y equilibrada: ¡Cuida tu peso!La obesidad es uno de los factores que influye en la aparición de la artrosis. Son numerosos los estudios que demuestran que la pérdida de peso alivia la sobrecarga de las articulaciones y, por lo tanto, se frena el desarrollo de la artrosis. Es altamente recomendable controlar el índice de masa corporal y realizar una dieta equilibrada que nos permita mantener una buena salud articular. Asimismo, algún dato sugiere que el consumo de vitaminas C (cítricos, pimiento, brócoli), D (pescados, lácteos, huevos) y E (frutos secos, orégano y albahaca, aguacates) podrían ser beneficiosas en la artrosis, a pesar de que es un tema controvertido porque no existen suficientes evidencias científicas que lo concluyan. No obstante, es recomendable mantener unos niveles normales de ellas en nuestro organismo. Por otro lado, existe evidencia de que la dieta mediterránea, basada en el uso de aceite de oliva virgen, disminuye la inflamación causada por la artrosis de rodilla.
Si quieres saber más sobre los beneficios de la dieta mediterránea, y cómo la alimentación puede frenar el doler e la inflamación de la artrosis, OAFI pone a tu disposición un servicio de nutrición a cargo de la Dra. Laura Arranz clicando aquí.